Holaaaaaaaaa de nuevo. Ahora mismo os escribo desde tierras "germanas". Me encuentro en casa de un amigo.
Hoy queria contaros algo que viví estando en Inglaterra:
Estaba leyendo un libro en ingles en un precioso y apacible parque de la ciudad con mi espalda apoyada en el tronco de un enorme arbol. Yo, como siempre, muy bohemio. Total, que se levanta una ráfaga de viento que hace temblar el arbol. Mientras se agitaba, yo podía notar con mi espalda como su tronco oscilaba muy lentamente.
En ese momento pensé en que los arboles están vivos, cosa de la que a veces no nos damos cuenta. Los vemos ahí, erguidos sobre el cesped, aparantemente inertes, como una parte mas de la decoracion de los parques o bosques.
Pero no, son algo mas que figuras decorativas, son los seres que bien pueden sustituir a nuestros pulmones, son un ramo de madera y hojas que nos dan cobijo durante el invierno y sombra durante el verano, son esas figuras majestuosas que a tantas imaginaciones han inspirado, son paraguas que han salvaguardado de la lluvia a animales y personas o son, simplemente, cojines para personas que buscan un lugar para leer en paz.
Me siento feliz. :)
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