Saber reaccionar es lo importante

Solemos creer que un buen día, ese en el que la vida resulta perfecta, puede ser fruto solamente de hechos externos a nosotros, es decir, que si las cosas salieran regular nuestro estado de ánimo se derrumbaría sin nosotros poder hacer nada.

Sin embargo, parece que no, que no somos meros espectadores de nuestra vida, nosotros tenemos las riendas de cómo tomarnos lo que nos sucede, incluso para estar de buen humor o no. Digo esto porque mi amigo Misael (¡gracias! :D ) me ha pasado un texto muy sorprendente acerca de que la vida en sí no es tanto lo que nos ocurre sino cómo reaccionamos a eso.

Tiene cierta lógica, ¿no creéis?, porque la vida es como la pintamos ya que lo que vemos lo hacemos desde nuestro punto de vista.

Por ejemplo, cuando alguien cree que su vida es desafortunada y desgraciada está haciendo que sea así, por eso hasta en ambientes humildes se puede uno sentir afortunadísimo, ¿cómo? -os preguntaréis, pues simplemente valorando lo que se es, una persona viva y libre (que no es poco), o lo que hay, amaneceres mágicos por ejemplo.

Ahora que recuerdo, Pilar, la mujer que dirige la Sociedad Literaria a la que asisto asiduamente, me comentó que a veces nos creemos poseedores de la verdad en el sentido de que creemos que nuestro modo de vida es el mejor y que por ello tenemos que imponerlo al resto del mundo. Pero este tema ,también interesantísimo, lo veremos en el próximo episodio. ;)

Bueno, que me voy por las ramas, aquí os dejo algunos extractos del texto:

El 10% de la vida está relacionado con lo que te pasa, el 90% de la vida está relacionado por lo forma en como reaccionas. ¿Qué quiere decir esto? Nosotros realmente no tenemos control sobre el 10% de lo que nos sucede.

Tú no puedes controlar el semáforo en rojo, pero puedes controlar tu reacción. No dejes que la gente se aproveche de ti. Tú puedes controlar como reaccionas.

No dejes que los comentarios negativos te afecten.

¿Cómo reaccionar si alguien te interrumpe en el tráfico? ¿Pierdes tu carácter? ¿golpeas sobre el volante? ¿maldices? ¿Te sube la presión? ¿A quien le preocupa que llegues 10 segundos tarde al trabajo? ¿Por qué dejar que los carros te arruinen el viaje?

¡A disfrutar!

Autor del texto citado: Stephen Covey

Enlace del texto citado aquí